Hace pocos días, mas exactamente el 28 de abril, se estrenó en Japón, “Babel”, el filme del mexicano Alejandro Gonzalez Iñarritu. Hasta acá la noticia no es demasiado llamativa. Bah, si, lo que llama la atención es lo tarde que le llegan las películas a los japoneses, pero bueno, no viene al caso.
La cuestión es que unas 15 personas sufrieron nauseas y mareos viendo la película y debieron abandonar la sala. Yo sabía de gente que se había dormido viéndola (Me incluyo), pero esto si que me sorprende.
Tanto es así que los diarios nipones advierten que la película puede ser perjudicial para la salud. Según un integrante de la compañía distribuidora del film, "la película incluye algunos efectos altamente estimulantes y algunos clientes se han quejado". Para los que vieron la película, es exactamente en la escena en la que la actriz japonesa Rinko Kikuchi entra en un boliche con sus amigos con un pedal de aquellos. La verdad es que la escena es medio confusa, por llamarlo de alguna manera, pero de ahí a vomitar…Según parece, las luces del boliche, (típicas de cualquier boliche, dicho sea de paso) “son susceptibles de desatar ataques epilépticos, además de otros síntomas en personas con problemas nerviosos”. Lo que yo no me explico es que pasa en los lugares nocturnos de Japón, ¡Debe ser una de desmayos terrible!.
La cuestión es que unas 15 personas sufrieron nauseas y mareos viendo la película y debieron abandonar la sala. Yo sabía de gente que se había dormido viéndola (Me incluyo), pero esto si que me sorprende.
Tanto es así que los diarios nipones advierten que la película puede ser perjudicial para la salud. Según un integrante de la compañía distribuidora del film, "la película incluye algunos efectos altamente estimulantes y algunos clientes se han quejado". Para los que vieron la película, es exactamente en la escena en la que la actriz japonesa Rinko Kikuchi entra en un boliche con sus amigos con un pedal de aquellos. La verdad es que la escena es medio confusa, por llamarlo de alguna manera, pero de ahí a vomitar…Según parece, las luces del boliche, (típicas de cualquier boliche, dicho sea de paso) “son susceptibles de desatar ataques epilépticos, además de otros síntomas en personas con problemas nerviosos”. Lo que yo no me explico es que pasa en los lugares nocturnos de Japón, ¡Debe ser una de desmayos terrible!.
Lo extraño es que la película ya se exhibió en mas de 40 países y en ninguno pasó nada. A lo sumo, y repito, tuvo algún que otro efecto somnífero.
Igual, recordemos que los japoneses son como susceptibles a estas cosas, ya que no sé si se acuerdan, pero en 1997 hubo como 100 ataques epilépticos en cadena por culpa de un episodio de Pokemon, en donde Picachu destellaba luces fluo. La verdad es que yo tiempo mas tarde vi el capítulo con gran entusiasmo, esperando un ataque o algo así, y para mi pesar, no me pasó absolutamente nada. Bueno, si, me quedé dormido. Pero reconozco que puede que sea un problema mío.
En fin, “Babel”, que en un principio parecía que le iba a dar miles y miles de alegrías al mexicano Iñárritu, finalmente le está causando mas dolores de cabeza que otra cosa. Primero fueron seis nominaciones al Oscar, de las cuales sólo ganó una, y por música. Después se peleó a muerte con su guionista de toda la vida que salió en los medios de todo el mundo hablando pestes de él, y ahora, 15 japoneses salen vomitando del cine después de verla.
Yo le diría que pruebe con una pata de conejo. Los dejo porque me voy a dormir.
Igual, recordemos que los japoneses son como susceptibles a estas cosas, ya que no sé si se acuerdan, pero en 1997 hubo como 100 ataques epilépticos en cadena por culpa de un episodio de Pokemon, en donde Picachu destellaba luces fluo. La verdad es que yo tiempo mas tarde vi el capítulo con gran entusiasmo, esperando un ataque o algo así, y para mi pesar, no me pasó absolutamente nada. Bueno, si, me quedé dormido. Pero reconozco que puede que sea un problema mío.
En fin, “Babel”, que en un principio parecía que le iba a dar miles y miles de alegrías al mexicano Iñárritu, finalmente le está causando mas dolores de cabeza que otra cosa. Primero fueron seis nominaciones al Oscar, de las cuales sólo ganó una, y por música. Después se peleó a muerte con su guionista de toda la vida que salió en los medios de todo el mundo hablando pestes de él, y ahora, 15 japoneses salen vomitando del cine después de verla.
Yo le diría que pruebe con una pata de conejo. Los dejo porque me voy a dormir.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario